Fernando Fernán-Gomez escribió en 1977 una obra de teatro titulada “Las bicicletas son para el verano“, y al igual que las bicicletas, para muchos de nosotros “los viajes en moto son para el verano“.
En esta época estival es cuando mayor concentración de relatos sobre motoristas y viajes en moto puedes seguir a través de las redes sociales. Uno tras otro, motoristas más o menos mediáticos, van cargando sus motocicletas y poniendo rumbo a sus destinos soñados a lo largo de muchos meses.
Hay viajes de pocos días a lugares cercanos pero tal vez desconocidos para todos nosotros, hay viajes lejanos que requieren de varias semanas, hay viajes a destinos de moda y otros a destinos icónicos para los motoristas de cualquier parte del planeta.
Desde la pantalla de tu ordenador o de tu smartphone, notas que dentro de tu interior también está creciendo el sueño de coger tu moto y de lanzarte a vivir una experiencia que posiblemente cambiará tu forma de entender la palabra VIAJAR.
Por qué, viajar en moto amigo mío, es una experiencia singular. Única. Algo qué una vez que pruebas es muy probable que te haga cambiar muchos conceptos.
Aprenderás al menos estas 5 cosas:
- El objetivo no es llegar lo antes posible al destino.
- Qué no necesitas llevar todo lo que crees necesitar.
- Qué el viaje no comienza al arrancar tu vehículo, sino al empezar a planificarlo.
- Qué los problemas que encuentres se solucionaran de una forma u otra.
- Encontrarás muchas cosas por el camino que merecen parar, levantarse la visera del casco y contemplar.
Ahora ya solo te falta tomar la decisión, dejarte de excusas y ponerte a soñar con un viaje. El que sea, será tu mejor viaje, la mayor aventura de la que podrás hablar con emoción cuando regreses y tengas la oportunidad de hablar con otros viajeros. Por qué ellos, comprenderán tus emociones, tus vivencias y te aconsejaran para el futuro.
¿Necesitas una ayuda? Está bien, en breve te dejaré mis consejos sobre cómo organizar un viaje en moto. (te recomiendo que te Suscribas al blog para no perderte nada). Pero no te pongas más excusas.
Viajar, viajar, malditos!!
Por lo que hasta ahora has leído, por todas las dudas que tenías, por todo. Te digo:
Viajas, viajad, malditos!!
Viajad a cualquier punto de cualquier mapa.
Emplead vuestro dinero en cosas que os podáis llevar con vosotros cuando hayáis muerto.
Viajad, viajad, malditos!!!
Pero estad preparados para un cambio en vuestras vidas.
Cambiará vuestra empatía con los que os rodean.
Cambiará la percepción del mundo que nos enseñan los medios.
Cambiará lo que les transmitáis a vuestros hijos.
Cambiará todo lo que estáis dispuestos a aprender de cada viaje.
Pero para que todo esto suceda…
Viajad, viajad, malditos!!